Alma
Si el amor que me tenéis Dios mío,
es como el que os tengo,
decidme en que me detengo
o vos en que os detenéis.
Alma que quieres de mí,
que quieres de mí.
Dios mío no más que verte, verte.
Y que temes más de ti, más de ti.
Lo que más temo es perderte.
Un alma en Dios escondida
que tiene que desear,
si no amar y más amar
y en amor toda encendida
volverte de nuevo a amar.