Ningún camino
Ningún camino es demasiado largo,
si lo recorro con Dios de la mano,
si Su sonrisa mueve mis pies,
y Su palabra calma mi sed.
Dulces se han vuelto mis agonías,
liviano el yugo de mi dolor,
cómo serian mis alegrías,
si Tú escribieras mi historia de amor.
Voy por las calles mirando asombrado,
la claridad que de pronto me has dado,
Tú me has devuelto la lucidez,
descubro el mundo por primera vez.
No hay ni desiertos ni playas ni mares
no hay ni distancias ni oscuros lugares
no existe el odio, ningún rencor
ni quien te quiera como lo hace Dios