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Así será la dedicación de nuestro templo

Todo lo que debes saber sobre la misa de consagración

El domingo 3 de septiembre, a las 17:00 hrs., nos congregaremos para vivir un gran acontecimiento. Después de un largo proceso de edificación, del que todos hemos sido parte, finalmente nuestro templo parroquial tendrá su rito de dedicación.

Toda iglesia debe ser dedicada por un obispo, en nuestro caso, nos acompañará este día nuestro arzobispo, el cardenal Celestino Aós.

Y para que vivas plenamente esta celebración, queremos contarte algunos de los momentos que se vivirán en esta misa, cuya duración será más extensa que de costumbre. ¿Por qué?

En primer lugar, al comenzar, el altar estará desnudo: sin manteles, candeleros y cruz. Las luces no estarán del todo encendidas y las puertas se hallarán cerradas. Iniciando de este modo, con una solemne procesión de entrada.

Luego, proceden una serie de ritos en los que cada acción posee un profundo significado. A grandes rasgos suelen ser:

1- El obispo acompañado por los diáconos asperja con el agua bendecida al pueblo, los muros de la iglesia y el altar. *

2.- Liturgia de la Palabra como de costumbre.

3.- Se cantan las letanías de los santos, se entronizan las reliquias y luego se canta la solemne oración de dedicación. *

4.-Unción del Altar y de los muros de la iglesia con el Santo Crisma. *

5.- Incensación del altar, de los ministros sagrados, del pueblo congregado y de los muros de la iglesia. *

6.- Se reviste el altar y solemnemente se encienden los cirios de este. Tras lo cual se ilumina por completo el resto del templo. *

7.- Prosigue la Liturgia eucarística como de costumbre.

8.- Según las disposiciones del lugar, la misa puede concluir con la Inauguración de la Capilla del Santísimo Sacramento, procesionando hacia ella.

Ciertamente, es difícil explicar en pocas líneas la riqueza de este rito, por lo que te animamos a acompañarnos junto a tu familia, para que en comunidad participemos de esta Eucaristía en la que nuestro anhelado templo parroquial será consagrado a Dios y al Culto Divino, y contemplar con tus propios ojos este bello rito.

¡Qué alegría cuando me dijeron: «Vamos a la casa del Señor»!

*Imágenes referenciales