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"Estamos llamados a acoger, en los detalles, en escuchar al otro"

Conoce las conclusiones de nuestra Jornada Puertas Abiertas

El pasado sábado 28 de mayo, tuvimos nuestro encuentro parroquial Puertas Abiertas, en las dependencias de la Universidad de los Andes.

Esta instancia está inserta en nuestro proceso de escucha a la Comunidad, dentro de la sinodalidad (hacer el camino juntos) a la que hemos sido llamados, de cara a convertirnos en pocos meses en una comunidad con templo.

Desde las 9:00 de la mañana y hasta las 13:00 hrs. de ese día, 96 participantes de la parroquia tuvimos la oportunidad de encontrarnos y trabajar en los lineamientos para lo que viene.

Con mucho entusiasmo, los asistentes participaron de un momento lúdico y cantaron con el padre Pedro, después pudimos asistir a un conversatorio con Carolina De´ll Oro y Roberto Sepúlveda, moderado por Manuel Uzal.

Mira un video del conversatorio, haciendo click en la imagen de abajo:

Más tarde nos dividimos en grupos para reflexionar en torno a preguntas que nos permitieron proyectar el sentido del trabajo para el próximo periodo. Al terminar, hubo un plenario en el que se compartieron las respuestas que surgieron en cada grupo.

Es muy relevante decirles que gran parte de las conclusiones que salieron de los grupos, tuvieron que ver con la importancia y riqueza de la diversidad, es decir, de cómo cada uno es valioso por el hecho de ser hijo e hija de Dios, y que como dice el Papa Francisco, no existen católicos de primera y segunda categoría, porque ante el Señor, todos somos sus hijos amados.

También se concluyó, que nuestra fragilidad nos permite acercarnos más a Dios, porque como dice san Pablo, es en nuestra debilidad que Cristo se hace fuerte, porque es Él quien vive en nosotros cuando le abrimos el corazón.

Por otro lado, debemos animarnos a participar en la parroquia, atrevernos a salir de la zona de confort y llevar en anuncio de la Buena Nueva por doquier.

Finalmente, se rescató en los equipos, la relevancia de aportar desde la realidad de cada uno, considerando esto como un tesoro, porque desde el corazón de cada persona, salen múltiples iniciativas inspiradas por el Espíritu.

Se nos acercaron para agradecer la instancia y expresar que quedaron "con gusto a poco". Otra participante comentó lo mucho que le gustó la intervención del padre Pedro, y sobre el conversatorio opinó: "pareciera ser que se llega mucho más y mejor cuando se expresan testimonios de experiencias personales junto al tema."

Marcela Núñez, por su parte, nos comentó "Siento que fue una mañana muy enriquecedora. Primero me encantó que hayamos iniciado la jornada con la Eucaristía. Sentí que el ambiente fue muy acogedor tanto para los nuevos, como para los no tanto. Me pareció excelente el conversatorio con los panelistas invitados, un lujo y muy aterrizados en sus planteamientos.

Me quedo con la frase 'la parroquia no es el párroco'; somos una comunidad guiada por el párroco y a la luz del Evangelio debemos caminar y acompañarnos los unos a los otros. Es momento de madurar, de hacernos adultos como bien dijo Carolina (De´ll Oro)."

Solange Vinet, también nos compartió su emoción, comentando que el encuentro le había parecido maravilloso, quedando encantada con la dinámica que hicieron los panelistas, pues "dieron un extraordinario testimonio y la alegría de ver a una comunidad pronta y diligente al servicio de Dios.

De todo y lo "mucho" recibido, me quedo con el punto de poder transmitir a otros el verdadero rostro de ¡¡¡Dios!!!, ese del que habla Job 42, 5-6 en la Biblia."

Finamente, nos dijo que su recomendación para la comunidad "sería que hubiese más formación en temas como: Oración Personal, Alabanza, Palabra y Perdón, que son para nosotros EFEC (Equipos de Formación Espiritual Cristiana), los pilares fundamentales para el crecimiento personal y servicio a otros".

Puedes ver más fotos de esta maravillosa instancia que vivimos, AQUÍ. 

Agradecemos nuevamente a las organizadoras, al padre Pedro y a los asistentes, gracias a quienes vivimos una jornada muy provechosa y llena de Dios.