Nuestra parroquia al amparo de María
Así vivimos la fiesta de La Virgen del Carmen
Una característica propia de todo chileno, es su profunda devoción a María. Ella es parte fundamental de la historia del país, y no podemos pretender ser patriotas sin amar a la Virgen del Carmen, nuestra patrona.
Por eso, julio es especial para la Iglesia que peregrina en Chile, pues celebramos en este mes, la fiesta de Nuestra Señora del Carmen. Y en este contexto, gran parte de los fieles de la parroquia se dieron cita el viernes 14, ocasión en que se impuso el Escapulario carmelita.
Poco a poco, los presentes se acercaban hacia el presbiterio, para recibir este sacramental y vestirlo con devoción, reconociendo visiblemente su deseo de permanecer siempre bajo el cuidado de María, y por su mediación, vivir cada segundo del día junto Cristo.
Ya el domingo 16 de julio, día de la Solemnidad de la Virgen del Carmen, nuestra comunidad marcó su presencia, en la procesión en la que la imagen de María recorrió las calles de la comuna, acompañada de bailes religiosos y una multitud entusiasta de celebrar a la Reina y Madre de Chile.
¡Virgen del Carmen, Reina de Chile, salva a tu pueblo que clama a Ti!