Tenemos cambios en el Consejo Pastoral
¡Gracias Ricardo y Claudia por su trabajo y liderazgo!
Tras 3 años en nuestra parroquia encabezando el Consejo Pastoral, el matrimonio formado por Ricardo Fernández y Claudia Meller finalizarán este servicio a nuestra comunidad.
Al respecto, ambos esposos realizan una mirada retrospectiva a este desafío asumido en el 2020 y que hoy concluye.
"En estos tres años aprendimos que los tiempos de Dios y sus caminos muchas veces no los comprendemos, pero si somos fieles a ellos, finalmente estaremos felices y plenos. Permanentemente, debemos reflexionar sobre cuál es el querer de Dios".
Agradecemos a ambos por toda su dedicación al llevar a cabo, durante este periodo, el trabajo que les fue encomendado.
Labor en que "fue fundamental la vinculación lograda entre los miembros de nuestra parroquia, permitiendo que nuestros trabajos y de todos los miembros de las pastorales hayan sido con un sentido de Misión", nos expresan Claudia y Ricardo.
Y añaden que dado lo anterior, "bajo los lemas de los dos últimos años; 'Con San José, Construimos Nuestra Casa' y 'Con Cristo, Hacemos Comunidad', hemos fundado no sólo la estructura y base de un nuevo templo, sino también de nuestra comunidad parroquial."
Por último, aprovechan nuestros medios para dirigir un mensaje final:
"Solo nos queda agradecer a Dios por la oportunidad que nos dio y a toda la comunidad por la gran ayuda y su excelente disposición a colaborar".
Nuevos encargados del Consejo Pastoral
Esta labor será asumida por el matrimonio de Juan Pablo O'Ryan y Andrea Varas, quienes tendrán la misión de hoy en adelante de encabezar el trabajo pastoral en esta nueva etapa de la parroquia, ya con la posibilidad próxima de utilizar las nuevas dependencias.
Les damos la bienvenida a nombre de todas las pastorales, y les encomendamos en nuestras oraciones, para que el trabajo que deberán realizar cuente siempre con la asistencia celestial de San Alberto Hurtado, y así juntos sigamos creciendo en la fe y dando gloria a Dios.
Agradecemos la confianza y apoyo de todos, e invitamos a cada uno a mantener el entusiasmo de una iglesia viva y agradecida, para amar y servir.
«Con Cristo hacemos comunidad»